viernes, 25 de enero de 2013

LA ESPADA DE MI CADETE

Formábamos dos líneas de niños, una enfrente de la otra,  y a la vez que cantábamos la canción, , tocábamos las palmas a su ritmo.Mientras, uno de nosotros, por turno, y con las manos en la cintura, se paseaba a lo largo de todo el espacio que había entre las dos líneas:

La espada de mi cadete
dicen que la tengo yo.

La tiene una hermana mía
clavada en el corazón.

La de los ojos azules,
azules como los míos,
que tiene una esperanza
y a Dios se la ha ofrecío( bis).

2 comentarios:

  1. Y casi siempre jugábamos en la calle, incluso en invierno.
    Maribel

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  2. Mil gracias por compartir esté tesoro! Me encanta Latuciliana!
    Adela

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